Hay momentos en los que el cristiano debe huir de la apariencia del mal, obedeciendo al Señor y manteniendo un buen testimonio. Debemos tener la madurez espiritual para discernir las trampas de Satanás y apartarnos de ellas. Esto solo es posible leyendo la Palabra de Dios y conociendo sus mandamientos. ¡Huye de la apariencia del mal y acércate a Dios!
Huye, pues, de las pasiones juveniles y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz con los que de corazón puro invocan al Señor.
(2 Timoteo 2:22)
Apártense de toda apariencia de mal.
(1 Tesalonicenses 5:22)

Apártate del mal y haz el bien;
busca la paz y síguela.
(Salmo 34:14)
Pero tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la perseverancia, la mansedumbre.
(1 Timoteo 6:11)
En el SEÑOR me he refugiado. ¿Por qué, pues, dicen a mi alma:
“Escapa cual pájaro al monte”?
(Salmo 11:1)
Y después de haberlos sacado fuera, le dijeron: ¡Escapa por tu vida! No mires atrás ni te detengas en toda esta llanura. Escapa a la montaña, no sea que perezcas.
(Génesis 19:17)
Hijo mío, no andes en el camino de ellos; aparta tu pie de sus senderos,
(Proverbios 1:15)
Aparta de ti la perversidad de la boca
y aleja de ti la falsedad de los labios.
(Proverbios 4:24)
A pesar de todo, el sólido fundamento de Dios queda firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos y “Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre del Señor”.
(2 Timoteo 2:19)
Porque habrá hombres amantes de sí mismos y del dinero. Serán vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, envanecidos y amantes de los placeres más que de Dios. Tendrán apariencia de piedad pero negarán su eficacia. A estos evita.
(2 Timoteo 3:2-5)
No les ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, quien no los dejará ser tentados más de lo que ustedes pueden soportar, sino que juntamente con la tentación dará la salida, para que la puedan resistir.
(1 Corintios 10:13)
Lee también: