Su Biblia Online Debemos tener cuidado con las amistades falsas. Dios nos llama a amar a los demás, pero debemos ser sabios al elegir nuestros amigos, estar atentos y aprender a discernir entre la amistad sincera y los falsos amigos.
No se dejen engañar: “Las malas compañías corrompen las buenas costumbres”.
(1 Corintios 15:33)
Guárdese cada uno de su compañero, y en ningún hermano tenga confianza; porque todo hermano engaña con falacia, y todo compañero anda calumniando.
(Jeremías 9:4)
Y cada uno engaña a su compañero, y ninguno habla verdad; acostumbraron su lengua a hablar mentira, se ocupan de actuar perversamente.
(Jeremías 9:5)
No creáis en amigo, ni confiéis en príncipe; de la que duerme a tu lado cuídate, no abras tu boca.
(Miqueas 7:5)
Así ha dicho el SEÑOR: “Maldito el hombre que confía en el hombre, que se apoya en lo humano y cuyo corazón se aparta del SEÑOR."
(Jeremías 17:5)
El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo;
Y amigo hay más unido que un hermano.
(Proverbios 18:24)
No me he sentado con los hombres falsos
ni tengo tratos con los hipócritas.
(Salmos 26:4)
Las riquezas atraen muchos amigos, pero el pobre es abandonado por su prójimo.
(Proverbios 19:4)
Muchos hombres proclaman su propia bondad;
pero un hombre fiel, ¿quién lo hallará?
(Proverbios 20:6)
El justo sirve de guía a su prójimo, pero la conducta de los impíos los hace errar.
(Proverbios 12:26)
Muchos imploran el favor del generoso; todos son amigos del hombre que da regalos.
(Proverbios 19:6)
Porque los tales son falsos apóstoles, obreros fraudulentos disfrazados como apóstoles de Cristo.
(2 Corintios 11:13)
Y serán entregados aun por sus padres, hermanos, parientes y amigos; y harán morir a algunos de ustedes.
(Lucas 21:16)
Todos los hermanos del pobre le odian; cuánto más se alejarán de él sus amigos.
Busca quienes le hablen, pero no los halla.
(Proverbios 19:7)
Escucha, oh SEÑOR, una causa justa; atiende a mi clamor.
Presta oído a mi oración que es
de labios sin engaño.
(Salmo 17:1)
Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza,
Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira.
(Salmo 40:4)
Yo soy uno de quien su amigo se mofa,
Que invoca a Dios, y él le responde;
Con todo, el justo y perfecto es escarnecido.
(Job 12:4)
Todos mis amigos íntimos me abominan;
aquellos a quienes amo se han vuelto contra mí.
(Job 19:19)
Mis parientes me han fallado; mis conocidos me han olvidado.
(Job 19:14)
Están expulsados de la comunidad,
y gritan contra ellos como a ladrones.
(Job 30:5)
Igualmente, se encendió su ira contra los tres amigos porque no hallaban qué responder, aunque habían condenado a Job.
(Job 32:3)
Y aconteció, después que el SEÑOR habló estas palabras a Job, que el SEÑOR dijo a Elifaz el temanita:
—Mi ira se ha encendido contra ti y tus dos compañeros porque no han hablado lo recto acerca de mí, como mi siervo Job.
(Job 42:7)
El SEÑOR restauró a Job, cuando él oraba por sus amigos, y aumentó el SEÑOR al doble todo lo que le había pertenecido a Job.
(Job 42:10)
El hombre perverso levanta contienda,
Y el chismoso aparta a los mejores amigos.
(Proverbios 16:28)
No me arrastres junto con los impíos, con los que hacen iniquidad, los cuales hablan de paz a su prójimo pero la maldad está en su corazón.
(Salmo 28:3)
El pobre se hace odioso a su prójimo, pero muchos son los que aprecian al rico.
(Proverbios 14:20)
El que cubre la transgresión busca amistad,
pero el que divulga el asunto aparta al amigo.
(Proverbios 17:9)
Muchas veces he estado en viajes a pie, en peligros de ríos, en peligros de asaltantes, en peligros de los de mi nación, en peligros de los gentiles, en peligros en la ciudad, en peligros en el desierto, en peligros en el mar, en peligros entre falsos hermanos;
(2 Corintios 11:26)
Guárdense de los falsos profetas, que vienen a ustedes vestidos de ovejas, pero que por dentro son lobos rapaces.
(Mateo 7:15)
He aquí que todas las mujeres que han quedado en la casa del rey de Judá serán entregadas a los oficiales del rey de Babilonia. Y ellas mismas dirán: ‘Te incitaron y prevalecieron contra ti tus hombres más íntimos. Tus pies se hundieron en el lodo, y ellos se volvieron atrás’.
(Jeremías 38:22)
Para todos mis enemigos he sido objeto de oprobio.
He sido objeto de horror para mis vecinos,
y de miedo para mis conocidos. Los que me veían huían de mí.
(Salmo 31:11)
Mis amigos y compañeros se han apartado de mi plaga;
mis parientes se han mantenido alejados.
(Salmo 38:11)
Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las inmoralidades sexuales, los robos, los falsos testimonios y las blasfemias.
(Mateo 15:19)
Y les digo a ustedes, mis amigos: No teman a los que matan el cuerpo y después no tienen nada peor que hacer.
(Lucas 12:4)
¡Ay de ustedes, cuando todos los hombres hablan bien de ustedes! Porque así hacían sus padres con los falsos profetas.
(Lucas 6:26)
Tus magistrados son rebeldes y compañeros de ladrones; cada uno ama el soborno y va tras las recompensas. No defienden al huérfano ni llega a ellos la causa de la viuda.
(Isaías 1:23)
He aquí que todos son iniquidad, y la obra de ellos nada es. Viento y vanidad son sus imágenes de fundición.
(Isaías 41:29)
Por tanto, así ha dicho el SEÑOR, he aquí que yo pongo tropiezos a este pueblo, y caerán en ellos los padres junto con los hijos; el vecino y su prójimo perecerán.
(Jeremías 6:21)
Porque así ha dicho el SEÑOR: ‘He aquí, yo te convertiré en terror a ti y a todos tus amigos. Caerán ante la espada de sus enemigos, y tus ojos lo verán. Y a todo Judá entregaré en mano del rey de Babilonia. Él los transportará a Babilonia y los herirá a espada.
(Jeremías 20:4)
Amargamente llora en la noche; sus lágrimas están en sus mejillas. No hay quien la consuele entre todos sus amantes. Todos sus amigos la traicionaron; se le volvieron enemigos.
(Lamentaciones 1:2)
Y tú, Pasur, y todos los moradores de tu casa iréis cautivos; entrarás en Babilonia, y allí morirás, y allí serás enterrado tú, y todos los que bien te quieren, a los cuales has profetizado con mentira.
(Jeremías 20:6)
Porque hicieron infamia en Israel, cometiendo adulterio con las mujeres de sus prójimos, y porque en mi nombre hablaron falsamente palabras que no les mandé, lo cual yo lo sé y soy testigo”, dice el SEÑOR.
(Jeremías 29:23)
Hasta la frontera te arrojaron tus propios aliados. Te defraudaron y pudieron más que tus confidentes. Los que comían de tu pan te han puesto trampa. ¡No hay en él discernimiento!
(Abdías 1:7)
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