Su Biblia Online La noche nos da la oportunidad de dejar a un lado los problemas del día para disfrutar de unas horas de descanso y sueño reparador. Dios creó la noche como un buen momento para descansar y renovar fuerzas, pero a menudo, nos cuesta desconectar. La Palabra de Dios puede darnos paz y ayudarnos a descansar, al recordarnos que Dios está con nosotros.
Salmo 4:8
En paz me acuesto y me duermo, porque solo tú, Señor, me haces vivir confiado.
(Salmo 4:8)
Salmo 16:7-8
Bendeciré al Señor, que me aconseja; aun de noche me reprende mi conciencia. Siempre tengo presente al Señor; con él a mi derecha, nada me hará caer.
(Salmo 16:7-8)
Salmo 42:8
Esta es la oración al Dios de mi vida: que de día el Señor mande su amor, y de noche su canto me acompañe.
(Salmo 42:8)
Salmo 62:5
Solo en Dios halla descanso mi alma; de él viene mi esperanza.
(Salmo 62:5)
Proverbios 19:23
El temor del Señor conduce a la vida; da un sueño tranquilo y evita los problemas.
(Proverbios 19:23)
Proverbios 3:24
Al acostarte, no tendrás temor alguno; te acostarás y dormirás tranquilo.
(Proverbios 3:24)
Salmo 62:1
Solo en Dios halla descanso mi alma; de él viene mi salvación.
(Salmo 62:1)
Juan 14:27
La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden.
(Juan 14:27)
Salmo 56:3
Cuando siento miedo, pongo en ti mi confianza.
(Salmo 56:3)
Salmo 63:6-7
En mi lecho me acuerdo de ti; pienso en ti toda la noche. A la sombra de tus alas cantaré, porque tú eres mi ayuda.
(Salmo 63:6-7)
Vea también: 26 salmos para dormir tranquilo.
Jeremías 31:25
Daré de beber a los sedientos y saciaré a los que estén agotados.
(Jeremías 31:25)
Salmo 121:5-6
El Señor es quien te cuida, el Señor es tu sombra protectora. De día el sol no te hará daño, ni la luna de noche.
(Salmo 121:5-6)
Salmo 55:22
Encomienda al Señor tus afanes, y él te sostendrá; no permitirá que el justo caiga y quede abatido para siempre.
(Salmo 55:22)
Salmo 91:1-2
El que habita al abrigo del Altísimo se acoge a la sombra del Todopoderoso. Yo le digo al Señor: «Tú eres mi refugio, mi fortaleza, el Dios en quien confío».
(Salmo 91:1-2)
Mateo 11:28
Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso.
(Mateo 11:28)
Hebreos 4:9-10
Por consiguiente, queda todavía un reposo especial para el pueblo de Dios; porque el que entra en el reposo de Dios descansa también de sus obras, así como Dios descansó de las suyas.
(Hebreos 4:9-10)
Proverbios 6:20-22
Hijo mío, obedece el mandamiento de tu padre y no abandones la enseñanza de tu madre. Grábatelos en el corazón; cuélgatelos al cuello. Cuando camines, te servirán de guía; cuando duermas, vigilarán tu sueño; cuando despiertes, hablarán contigo.
(Proverbios 6:20-22)
Salmo 127:1-2
Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles. Si el Señor no cuida la ciudad, en vano hacen guardia los vigilantes. En vano madrugan ustedes, y se acuestan muy tarde, para comer un pan de fatigas, porque Dios concede el sueño a sus amados.
(Salmo 127:1-2)
Salmo 3:5
Yo me acuesto, me duermo y vuelvo a despertar, porque el Señor me sostiene.
(Salmo 3:5)
¡Que tengas un buen descanso!