¡Es maravilloso sentir la presencia de Dios! En su presencia podemos recibir la paz, el consuelo, la fortaleza y dirección que necesitamos para continuar en el camino de la vida con firmeza, sabiéndonos acompañados por el Rey de reyes y Señor de señores. ¡Busquemos la presencia de Dios cada día!
- Permite que la presencia de Dios transforme tu ser - Salmo 51:10-12, Hebreos 10:19-22
- La presencia de Dios trae sanidad al alma herida - Salmo 34:17-18, Salmo 147:3
- En la presencia de Dios hay plenitud de gozo - Salmo 16:11, Salmo 100:2
- Busca la presencia de Dios y renueva tu corazón - Salmo 51:10-12
- No podemos huir de su presencia: siente el gozo de saberte acompañado - Salmo 139:1-12
- Acércate con confianza y recibe de su plenitud - Hebreos 10:19-22
- La presencia de Dios da dirección y propósito para el camino - Proverbios 3:5-6, Salmos 32:8
- Renuévate cada día en la presencia de Dios - Lamentaciones 3:22-23, Salmo 5:1-3
- No estás solo: el Señor te acompaña en las batallas - Éxodo 14:13-14, Deuteronomio 31:6
- En tiempos de aflicción, refúgiate en la presencia de Dios - Salmo 46:1-3
- Dios habita con los de corazón humilde - Isaías 57:15, Salmo 138:6
- No lo olvides: en la presencia de Dios hay libertad - 2 Corintios 3:17, Romanos 8:1-2
- Recibe verdadero descanso al refugiarte en su presencia - Éxodo 33:14, Mateo 11:28
- Busca al Señor de corazón: disfrutarás de su presencia por siempre - Jeremías 29:12-13, Santiago 4:8
- Adora al Señor de corazón y siente su presencia - Juan 4:23-24, Salmo 63:3-4
- En la presencia de Dios recibes valentía para avanzar - Josué 1:9, Deuteronomio 31:6
- Disfruta de la presencia de Dios, camina en su luz - Juan 8:12, Juan 12:46
- Aviva tu corazón: busca la presencia de Dios - Salmo 42:1-2, Salmo 36:9, Salmo 27:7-8
- Permite que la gloria de su presencia te transforme - 2 Corintios 3:18, Gálatas 5:19-26
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