Oren a mí y yo los escucharé, dice el Señor. Dios nos llama a orar siempre. Cuando oras y pides su ayuda, ¡Dios te oye! Quien ora, ve milagros. Solo debe clamar y creer en el Señor. ¡Jesús tiene todo el poder para responder a tus oraciones! ¡Hay poder en la oración!
1. ¡Oren a mí, y yo los escucharé!
Entonces me invocarán. Vendrán y orarán a mí, y yo los escucharé.
(Jeremías 29:12)
Invocar al Señor significa clamar con fe, como un amigo que le pide ayuda a otro. Dios nos escuchará si nos acercamos a él en oración con confianza.
2. Todos podemos orar
Elías era un hombre con debilidades como las nuestras. Con fervor oró que no lloviera, y no llovió sobre la tierra durante tres años y medio. Volvió a orar, y el cielo dio su lluvia y la tierra produjo sus frutos.
(Santiago 5:17-18)
No necesitas ser alguien muy espiritual para orar y recibir respuesta. Elías era una persona normal, como tú y como todos nosotros. Él oraba con fe y Dios respondía. Sigue su ejemplo: ora y ten fe. Dios te escucha y responderá.
3. Jesús tiene el poder
Cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre, yo la haré; así será glorificado el Padre en el Hijo. Lo que pidan en mi nombre, yo lo haré.
(Juan 14:13-14)
El poder de la oración no viene de ti. El poder está en Jesús; él es quien responde a la oración y hace realidad lo que parece humanamente imposible.
¡Pero cuidado! La oración es un pedido, no una exigencia o un mandato a Dios. Jesús atiende la oración cuando es una que glorifica al Padre.
4. La oración trae sanidad
Por eso, confiésense unos a otros sus pecados, y oren unos por otros, para que sean sanados. La oración del justo es poderosa y eficaz.
(Santiago 5:16)
Dios te escucha cuando oras por sanidad. Sea cual sea la sanidad que necesites - espiritual, emocional o física - puedes llevar tu petición delante del Señor confiando en que responderá. Cree en Dios y espera. Él intervendrá en la situación de acuerdo con su voluntad.
5. La oración libera
Él les dijo: Este género con nada puede salir sino con oración.
(Marcos 9:29)
Jesús liberta y transforma vidas. Si oras a él con fe y temor, Dios expulsará todo poder maligno que oprime. Ora con confianza en la gracia que Jesucristo concede mediante la oración. ¡El Señor se moverá!
6. Si oras, verás milagros
Les aseguro que, si tienen fe y no dudan (...), podrán decirle a este monte: “¡Quítate de ahí y tírate al mar!”, y así se hará. Si ustedes creen, recibirán todo lo que pidan en oración.
(Mateo 21:21-22)
¿Quieres ver milagros y cosas maravillosas? Dios usa tus oraciones para moverse y realizar milagros. Recuerda que sirves al Dios todopoderoso. Pide con fe, pide a menudo y espera la intervención de Dios.
7. Pide, busca, llama...
Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá.
(Mateo 7:7)
Dios te ama. Él quiere hacer cosas buenas a tu favor y también bendecir aquellos que están en tu entorno. Lleva tus peticiones ante Dios, no permitas que la timidez o la incredulidad te hagan permanecer en silencio. ¡Pide, busca, llama! Ora por ti y por todos los que conoces. Busca la presencia del Señor y confía en él. Él obrará.
¡Ora! Persevera en la oración y verás el poder de Dios en acción: