Encomendar tu camino a Dios es preferir su voluntad más que tus propios planes. Es dar prioridad y permiso a la voluntad del Señor. Podemos tomar nuestras propias decisiones, pero cuando invitamos a Dios a ayudarnos, estamos encomendándole nuestro camino.
Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará.
(Salmo 37:5)
Sin duda, entregar nuestros planes a Dios es la mejor decisión que podemos tomar. Sus planes son más grandes que los nuestros y su voluntad es soberana. Cuando permitimos que Dios nos guíe, reconocemos su importancia en nuestras vidas.
Cómo entregarle tu camino al Señor
Entregarse es confiar al 100 %. Cuando dejamos de tomar nuestras propias decisiones para que Dios nos guíe, mostramos nuestra confianza en él. Aquí tienes algunos pasos para entregarle tu camino al Señor:
- Ora, pídele a Dios que guíe tu vida. Dale permiso para guiar tus pasos.
- Lee la Biblia, la Palabra de Dios. Cuanto más conocemos a Dios, más confiamos en él.
- Antes de tomar cualquier decisión, busca escuchar la voz de Dios. Pídele ayuda y él te guiará.
En el Salmo 37, tenemos un gran ejemplo de los beneficios de confiar en Dios:
Confía en Jehová, y haz el bien;
Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad.
Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
(Salmo 37:3-4)
Más que confiar, deleitarse en el Señor significa estar satisfechos con él. Solo podemos estar satisfechos cuando estamos llenos de su Espíritu. Por lo tanto, la mejor manera de confiar en Dios es crear una relación de intimidad con él. Cuando buscamos a Dios, nos llenamos de fe y esperanza, y esto nos da la confianza para compartir nuestros sueños con él.
Cuanto más conocemos a Dios, más confiamos en él. No podemos entregarle el timón de nuestras vidas sin confiar plenamente en él y su voluntad para nosotros. Por lo tanto, búscalo, aprende más sobre él. Aliméntate de la Palabra de Dios, deléitate en él, entrégale tu vida y tus planes. ¡Él hará más de lo que imaginas!
Encomienda al SEÑOR tu camino; confía en él, y él hará.
(Salmo 37:5, Versión Reina Valera Actualizada)
Confía en Dios y aprende a deleitarte en él. Lee: