Nuestra casa, nuestro hogar, es el lugar donde queremos sentirnos seguros, donde deseamos vivir en paz con nuestra familia. Dios es el único que puede cuidar de nuestro hogar y protegerlo en todo momento. Permite que estas oraciones te orienten y te ayuden a poner la seguridad de tu casa en las manos de Dios.
1. Oración para bendecir un hogar
Amado Padre Celestial, gracias te doy por el hermoso regalo de tener un hogar donde habitar. Gracias porque podemos regresar a nuestra casa cada día y descansar tranquilamente. Reconozco que todo lo que tenemos viene de ti, incluida esta casa, y que este lugar es fruto de tu amor y tu misericordia. Dios amado, te ruego de todo corazón que bendigas cada rincón de esta casa y a cada una de las personas que viven en ella. Que tu presencia sea constante y que tu paz inunde cada habitación.
Señor, gracias porque tú eres el Dios de amor, el Dios que bendice y cuida de nosotros, tus hijos. Sigue derramando tus bendiciones sobre cada uno de nosotros y ayúdanos a estar atentos y agradecidos frente a tu cuidado y provisión, porque todo lo bueno que tenemos viene de ti.
Mi Dios, hoy oro y declaro que este hogar está bajo tu bendición y protección. Tú estás con nosotros. Tú nos cuidas, tú provees a todas nuestras necesidades y de ti recibimos siempre bendiciones maravillosas sobre nuestro hogar. Señor, que tu amor abunde en nuestros corazones y que tu Espíritu Santo reine aquí por siempre, para que vivamos llenos de tu paz y hagamos siempre tu voluntad.
Padre, danos sabiduría para tomar decisiones que te glorifiquen. Queremos vivir en tu voluntad, guíanos con tu Palabra. Habla a nuestros corazones para que vivamos en obediencia y así, disfrutemos de tus bendiciones. Sé tú el Rey de este hogar, porque sé que donde tú reinas, hay paz, hay gozo y hay bendición. En el nombre poderoso de Jesús, amén.
2. Oración para proteger la casa
Señor Todopoderoso, ponemos esta casa en tus manos y te pedimos tu divina protección. Que tus ángeles acampen alrededor de este lugar, tal como dice tu Palabra: “El ángel del Señor acampa en torno a los que le temen; a su lado está para librarlos” (Salmo 34:7). Cúbrenos, Señor, con tu manto de poder y líbranos de todo peligro, desastre natural o ataque del enemigo.
Padre, confiamos en tu promesa de protección que nos asegura que no debemos temer a catástrofes o ataques, porque tú eres nuestro amparo y fortaleza. Tú eres nuestra ayuda segura en todo momento y sabemos que podemos confiar en ti. Guárdanos siempre del mal y derrama bendiciones constantes sobre nosotros.
Señor, no permitas que el enemigo trame mal contra nosotros. Pon tus ángeles protectores a nuestro alrededor, de día y de noche, que tu protección sea sobre nosotros ante cualquier trama del enemigo.
Mi Dios, tú eres nuestro refugio y fortaleza, nuestro escudo y protector. Te pedimos que nos guardes también de personas malintencionadas y de todo mal visible o invisible. Rodéanos con cánticos de liberación y haz de este hogar un lugar de paz, fe, comprensión y esperanza. En ti confiamos, Señor, porque sabemos que tu cuidado es perfecto. En el nombre de Jesús, amén.
3. Oración pidiendo la protección de Dios sobre el hogar, inspirada en el Salmo 91
Gracias, Padre Dios, porque tú eres nuestro refugio y nuestro protector. Bajo tu sombra encontramos descanso y seguridad. Hoy te pedimos que cubras nuestro hogar con tu presencia, que tus alas cubran cada rincón de nuestra casa, y que tu paz reine en nuestras vidas. Tú eres nuestro castillo firme en medio de la tormenta, nuestro amparo cuando todo parece incierto. Confiamos en ti, Señor, y en tu promesa de protección.
Señor, por favor, derrama sobre nuestro hogar la protección de la que habla el Salmo 91, líbranos de todo mal y de todo peligro que quiera acercarse.Que ninguna enfermedad ni ningún espíritu de temor toque nuestra casa. Da la orden y pon tu escudo protector alrededor de nuestra familia, que tus ángeles acampen a nuestro alrededor y nos guarden en todos nuestros caminos.
Padre amado, aparta de nosotros toda preocupación o ansiedad. Llena nuestros corazones con la confianza de sabernos amados y cuidados por ti. Danos serenidad en la noche y fortaleza durante el día. Que tu Espíritu Santo habite en medio de nosotros, trayendo armonía, amor y fe.
Tú has prometido cuidarnos y hoy declaramos con confianza: tú eres nuestro Dios en quien confiamos. No temeremos al mal, porque tú estás con nosotros. En tus manos ponemos nuestra casa, nuestra entrada y nuestra salida, nuestros sueños y nuestras esperanzas.
Gracias, Señor, porque tú siempre escuchas nuestras oraciones y respondes con amor. Gracias porque tu fidelidad nos sostiene y tu salvación nos cubre. Bajo tus alas vivimos seguros. En el nombre de Jesús, declaramos que nuestro hogar es un lugar de bendición, paz y protección divina. Amén.
Vea también: