Explicación del Salmo 2: ¿quién es el ungido del Señor? (estudio bíblico)


Equipo de Bibliaon
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El Salmo 2 es un cántico de confianza en la autoridad y protección divina frente a las amenazas de los reyes y pueblos que se rebelan contra Dios. El salmo es atribuido al rey David. Revela que Dios ha establecido a su ungido para gobernar con poder. El salmo nos enseña a reconocer la soberanía de Dios y a confiar en la justicia divina, además de llamarnos a someternos al Señor con reverencia y obediencia.

Según el Salmo 2, el ungido del Señor es el rey escogido por Dios para gobernar con autoridad y poder. Él representa al Mesías, Jesús, a quien Dios concede poder sobre las naciones. Ese ungido es protegido por Dios y ejerce juicio justo, siendo el líder que trae salvación y establece el reino de Dios en la tierra.

Salmo 2
1. ¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas?
2. Se levantarán los reyes de la tierra, Y príncipes consultarán unidos contra Jehová y contra su ungido, diciendo:
3. Rompamos sus ligaduras, Y echemos de nosotros sus cuerdas.
4. El que mora en los cielos se reirá; El Señor se burlará de ellos.
5. Luego hablará a ellos en su furor, Y los turbará con su ira.
6. Pero yo he puesto mi rey sobre Sion, mi santo monte.
7. Yo publicaré el decreto; Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy.
8. Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión tuya los confines de la tierra.
9. Los quebrantarás con vara de hierro; Como vasija de alfarero los desmenuzarás.
10. Ahora, pues, oh reyes, sed prudentes; Admitid amonestación, jueces de la tierra.
11. Servid a Jehová con temor, Y alegraos con temblor.
12. Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino; Pues se inflama de pronto su ira. Bienaventurados todos los que en él confían.

¿Cuál es el significado espiritual del Salmo 2?

El Salmo 2 tiene un profundo significado espiritual. Revela la soberanía de Dios sobre todas las naciones y la autoridad de su ungido, que es el Mesías. Muestra que, aunque los reyes y pueblos se levanten en rebelión contra Dios, sus planes son inútiles frente al propósito divino.

El salmo enseña que Dios ha establecido a su Hijo para gobernar con poder y justicia, ofreciendo protección y victoria a los que confían en él. Espiritualmente, nos llama a reconocer la autoridad de Dios y a someternos a su reinado, rechazando la rebeldía y buscando refugio en su protección.

El Salmo 2 señala a Jesucristo. Fue él quien cumplió la promesa del ungido, trayendo salvación y reconciliación. El salmo nos invita a la fe, a la reverencia y a la confianza en la justicia y poder de Dios, asegurando paz y seguridad para los que siguen al Señor.

Explicación del Salmo 2 versículo a versículo

Salmo 2:1-3

¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas?
Se levantarán los reyes de la tierra, Y príncipes consultarán unidos contra Jehová y contra su ungido, diciendo: Rompamos sus ligaduras, Y echemos de nosotros sus cuerdas.
(Salmo 2:1-3)

El salmo comienza con una pregunta retórica: “¿Por qué se amotinan las gentes, y los pueblos piensan cosas vanas?”. Esta pregunta resalta la inutilidad de los esfuerzos humanos contra la soberanía de Dios.

Los reyes y gobernantes se levantan contra el Señor y su ungido, buscando romper sus restricciones. Este pasaje revela la tendencia humana a resistir la autoridad de Dios, ignorando que tales acciones son vanas y sin fundamento. El inicio nos enseña que, a pesar de las apariencias, Dios está en control y sus planes prevalecerán sobre cualquier oposición.

Salmo 2:4-6

El que mora en los cielos se reirá; El Señor se burlará de ellos. Luego hablará a ellos en su furor, Y los turbará con su ira. Pero yo he puesto mi rey sobre Sion, mi santo monte.
(Salmo 2:4-6)

Ante la rebelión del hombre, Dios reacciona con risa y burla, demostrando que a él no le afectan las acciones de los poderosos. En su ira los reprende y declara que ha establecido a su Rey en Sion, su santo monte.

Este pasaje enfatiza la autoridad absoluta de Dios sobre todas las cosas y su capacidad de cumplir su plan, independientemente de la resistencia humana. El salmo nos recuerda que, aun frente a la oposición, la voluntad de Dios se cumplirá.

Salmo 2:7-9

Yo publicaré el decreto; Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy. Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión tuya los confines de la tierra. Los quebrantarás con vara de hierro; Como vasija de alfarero los desmenuzarás.
(Salmo 2:7-9)

El salmista proclama el decreto del Señor: “Mi hijo eres tú; yo te engendré hoy” (Salmo 2:7). Dios ofrece al Rey la autoridad sobre las naciones como herencia y los confines de la tierra como posesión.

Este pasaje es interpretado como una profecía mesiánica, señalando la autoridad de Cristo sobre todas las naciones. Jesús es el Rey establecido por Dios, con autoridad divina para gobernar y cumplir los propósitos de Dios en la tierra.

Salmo 2:10-12

Ahora, pues, oh reyes, sed prudentes; Admitid amonestación, jueces de la tierra. Servid a Jehová con temor, Y alegraos con temblor. Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino; Pues se inflama de pronto su ira. Bienaventurados todos los que en él confían.
(Salmo 2:10-12)

El salmo concluye con un llamado a los reyes y jueces de la tierra a ser prudentes y aceptar la advertencia de Dios. Se les exhorta a servir al Señor con temor y a alegrarse con temblor.

La expresión “Honrad al Hijo” sugiere una actitud de sumisión y honra al Rey establecido por Dios. Este pasaje resalta la importancia de la humildad y reverencia ante la autoridad de Dios.

¿Por qué David escribió el Salmo 2?

David escribió el Salmo 2 para expresar confianza en la protección y autoridad de Dios frente a las amenazas de los enemigos y rebeldes que conspiraban contra él y su reinado.

El Salmo 2 refleja su experiencia personal como rey, resaltando que Dios lo estableció como líder escogido. Además, el texto revela la convicción de que el poder de Dios es soberano sobre todas las naciones y reyes.

David exhorta a la obediencia a Dios y a la sumisión a su ungido, reafirmando la esperanza de justicia y seguridad bajo la protección del Señor.

¿Quién es el ungido en el Salmo 2?

En el Salmo 2, el ungido del Señor es aquel escogido y establecido por Dios para reinar sobre todas las naciones. Originalmente, puede referirse a un rey, pero su sentido pleno apunta al Mesías prometido. Él recibe autoridad divina, protección y la misión de someter la rebelión humana, trayendo justicia.

La figura retratada en el Salmo 2 es identificada en Jesucristo, el Hijo de Dios, quien cumple la profecía, reina con poder eterno y ofrece refugio seguro a todos los que en él confían. Así, el salmo revela la realeza y misión salvadora de Cristo.

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